Iniciamos caminando por el Sendero Dorothy Wilson, homologado con aceras de cemento y continuamos hacia la Laguna Jicotea, ya que la misma está llena de estas interesantes tortugas Jicotea o de “orejas rojas” cuyo nombre cientÃfico es (Trachemys venusta) y son bastante común de ver como mascota en hogares panameños.
Francisco es muy observador y tiene los sentidos muy desarrollados, de inmediato escuchó y avistó un mono tità (Saguinus geoffroyi), entre las ramas cerca al sendero. Un poco más adelante y vio un venado. Primera vez que yo veÃa uno en el Metropolitano. El venado comÃa algo entre unos árboles cercanos a la calle circundante y estaba muy camuflado con el entorno.
Seguimos con el Sendero El Roble, donde observamos variadas aves y vistas muy lindas del bosque. De ahà subimos al Sendero Los Caobos, donde pusimos nuestro colchoncito inflable y disfrutamos de un picnic y tarde amena, recostados viendo los aviones pasar, asà como las aves rapaces que pasaban volando; la vista en este sendero es espectacular, se ve parte del PacÃfico de la ciudad de Panamá. Ambos miradores son espectaculares.
Bajamos por el Sendero del Mono TitÃ, observando la diversa flora. Tengo un libro de las plantas del parque y con el de aves, resulta un verdadero safari para mi hijo. Llegamos hasta el Mirador Los Trinos donde descansamos para bajar la última loma, pasando cerca de la grúa y luego salimos a la garita casi en la calle. Aquà encontramos agua para lavarnos las manos y continuar lo poco que hacÃa falta.
No cabe duda que pasar el dÃa en este parque es sumamente divertido para pasarlo en familia, pareja, traer turistas extranjeros o hacer un safari a ver quien encuentra más animales.
Una guía de turismo ecológico en Panamá, dedicada a descubrir ríos, montañas, senderos y aventuras en la naturaleza. Ideal para los amantes del aire libre y la exploración rural.